Durante los allanamientos a la casa de Reina Isabel Acosta, empleada del Departamento Jurídico de la Oficinas de Solvencias, las autoridades encontraron armas y páginas en blanco con firma y sello de la Secretaría General de la Fiscalía. La mujer exigía sobornos para limpiar los antecedentes policiales.
Entre lo incautado por el Ministerio Público se encuentran tres fusiles: un Vz. 58 (conocido como Checho), un Fal y un G-3.
Las tres armas utilizan munición calibre 7.62 milímetros. Y son de uso exclusivo de la Fuerza Armada.
Aparentemente los fusiles pertecen a la pareja sentimental de Reina Acosta, el comsionado Julián Belloso, graduado de la primera promoción de la Policía Nacional Civil.
Julián Belloso se convirtió en comisionado policial después que la guerrilla del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) dejara las armas. Fue miembro del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP).
A inicios del 2017, la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional Civil (PNC) ordenó una investigación en contra de Reina Isabel Acosta. Las sospechas eran que Acosta exigía sobornos para limpiar los antecedentes policiales.
Posteriormente, la Fiscalía General de la República (FGR) inició una investigación de carácter penal.
Durante el primer semestre del año la empleada continuó laborando en la Oficina de Solvencias de la Policía. Sin embargo, en julio pasado fue trasladada a la División de Turismo de la Subdirección de Seguridad Pública.
El pasado miércoles, el Ministerio Público ordenó la captura de Reina Isabel Acosta, acusada de cohecho activo y falsedad documental. Pedía entre $300 y $650 para limpiar el historial policial de personas que tienen antecedentes.
El abogado Edgardo Molina Morales era el enlace entre la persona que buscaba limpiar su historial policial y la empleada policial. Este abogado también fue capturado.