El Salvador
lunes 25 de noviembre de 2024

La historia del joven que se salvó de ser ejecutado por pandillas en San Salvador

por Redacción


El joven fue privado de libertad por tres pandilleros que fingían ser vendedores ambulantes en el centro de San Salvador, sobrevivió y esta es su historia.

Un joven se salvó de ser asesinado por tres pandilleros que lo privaron de libertad en pleno centro de San Salvador −quienes se esconden en la fachada de algunos vendedores ambulantes− porque uno de los palabreros aseguró que la víctima no representaba ningún peligro para sus operaciones.

Manuel, de 25 años de edad, dijo a Diario1 que frecuentemente visita el centro de San Salvador para realizar las compras semanales y llevar artículos de primera necesidad a su familia.

El sábado 21 de enero, el joven salió de su vivienda, ubicada en uno de los municipios del Gran San Salvador, tomó un autobús y se dirigió a los alrededores del parqueo Hula Hula y la calle Ruben Darío.

Como normalmente lo hace,  el joven caminó por varias cuadras del centro capitalino buscando los mejores precios para adquirir los productos que necesitaba. No se percató que era perseguido por tres pandilleros que fingen ser vendedores ambulantes y que antes había visto con sus carretillas repletas de hortalizas.

La víctima se detuvo en uno de los puestos de CD y DVD  “piratas” ubicados sobre la 5ta. avenida Norte y cercano a la alameda Juan Pablo II, cuando fue privado de libertad por los pandilleros, quienes lo llevaron a la parte trasera de una de las champas ubicadas en la zona.

Manuel explicó a los delincuentes que solamente acudía al lugar a realizar algunas compras y que no pertenecía a las pandillas y que se dedicaba a trabajar para llevar el sustento a su familia.

Los pandilleros realizaron un chequeo a su víctima y determinaron que no andaba armado, no tenía tatuajes y al parecer no representaba mayor peligro; sin embargo, llamaron a uno de los palabreros de la zona, quien decidiría si el joven era asesinado o era dejado en libertad.

Al parecer, según la víctima, el palabrero se encontraba cerca de donde estaba siendo retenido y estaba observando todo lo que ocurría, por lo que los pandilleros le preguntaron si asesinaban al joven. El celular fue puesto en alta voz para que los tres delincuentes pudieran escuchar las órdenes que recibirían.

“No hay clavo con él.  No se pelen. Todo tranquilo”, dijo el palabrero al asegurar a los otros tres pandilleros que la víctima había sido monitoreada con anterioridad y no había ningún riesgo con él.

El joven fue liberado por los pandilleros y los mismos huyeron en dirección al parque Hula Hula y él caminó lo más rápido que pudo en sentido contrario, es decir, hacia el Parque Infantil.

Manuel afirmó que espera no regresar al centro de San Salvador por el nivel de peligrosidad de la zona, por lo que tendrá que realizar sus compras en otro lugar o acudir a supermercados privados.

(Algunos detalles de la historia fueron modificados para proteger a la identidad de la víctima).