Un comando armado de la Chirilagua Locos Salvatruchos (originaria de San Miguel) ejecutó a siete de sus compañeros de la Mara Salvatrucha que pertenecían a una clica que está arraigada en Jucuarán, Usulután. Los asesinos iban vestidos con ropas similares a las de policías y soldados.
De acuerdo con la información preliminar las víctimas departían en una poza ubicada en el cantón El Zapote cuando un comando armado de casi 30 mareros las neutralizó, llamó una por una y las ejecutó. Dos de los muertos tenían antecedentes penales por homicidios.
Los alias de los fallecidos son: Maizón, Chicho, Buitre, Lando, Chaqueta, Científico y un menor de edad conocido como Chunga.
Después de la matanza una patrulla de la Policía Nacional Civil (PNC) llegó al lugar a verificar y la emboscaron integrantes del comando armado que había quedado en los alrededores vigilando. Hubo un tiroteo en el que resultó herido uno de los mareros pero logró escapar en una motocicleta.
En este momento se desarrolla un fuerte operativo policial que incluye helicópteros que sobrevuelan la zona de la masacre.
A principios de mayo de 2015 en el cantón Ojo de Agua, Jucuarán fue cometida una masacre de manera similar: un comando fuertemente armado interviene el lugar y asesina a miembros de la Mara que están desobedeciendo las órdenes de la cúpula. «Después de matar a los siete hombres los atacantes se reagruparon y en forma disciplinada abandonaron el caserío. Nadie corrió. Los sujetos escaparon hacia un lugar conocido como caserío Guadalupe», dice el reporte que Diario1 escribió esa vez.
