El ministro de Seguridad, Benito Lara, aseguró la noche de este martes que el empresario Rodrigo Chávez confesó ante la justicia que participó en el caso de la persona mutilada en la colonia Lomas de San Francisco.
“Se capturó como uno de los principales sospechosos, no se sabía que era hijo del doctor Chávez Mena, pero una vez se dio con él, nos dimos cuenta de quién era. Y bueno, él ha planteado que ha participado en esto”, reveló.
El funcionario también aseguró que el caso está vinculado a una red de crimen organizado. No obstante, no reveló más datos justificando que la investigación aún no ha finalizado.
“Este es un caso que llevó a hacer una investigación con muchas unidades especializadas. Está vinculado a una especie de una red que tiene que ver con crimen organizado… Pero hay más en esto. Quiero plantearles que estamos continuando con las investigaciones. No están cerradas y por eso no vamos a dar más detalles mientras no profundicemos en el caso”, comentó durante la entrevista de Ocho en Punto.
Acusación fiscal
La Fiscalía General de la República (FGR) presentará este miércoles el requerimiento contra Rodrigo Chávez Palacios por homicidio agravado, caso conocido como el descuartizador de la colonia Lomas de San Francisco.
A través de su cuenta en Twitter, la Fiscalía informó este martes por la tarde: “FGR presenta mañana en Juzgado de Paz de Antiguo Cuscatlán a 10:00 am, requerimiento contra Rodrigo Chávez Palacios, por homicidio agravado”.
La Fiscalía acusará a Rodrigo Chávez Palacios del asesinato de un albañil que trabajaba en la alcaldía de Santa Tecla. Se cree Chávez Palacios no actuó solo en ese crimen.
Jonathan Mendoza Ortiz, un maestro de obras de 32 años, que por cinco años trabajó en la alcaldía tecleña, habría muerto de un disparo en la cabeza y un día después fue desmembrado.
Las partes más importantes del cuerpo de Mendoza fueron abandonadas, en maletas, no a mucha distancia del apartamento donde vivía Rodrigo Chávez Palacios, en la colonia altos de San Francisco.
Las principales evidencias contra Chávez son las muestras de sangre que quedaron en el apartamento que rentaba a un militar retirado.
Pero también las autoridades lograron probar que Chávez compró, en una ferretería cercana, un serrucho, un corvo y un hacha.
Incluso, el recibo de compra lo encontraron en ese apartamento y, posiblemente, eso ayudó a las autoridades a conseguir una filmación del momento en que compraba esos instrumentos.
En el video se mira a Chávez comprando esas herramientas, a la misma hora que se detalla en el tiquete de compra que apareció en su apartamento.
Pero, la Policía considera que Chávez no actuó solo. Por eso ampliaron las investigaciones para tratar de dar con al menos un cómplice.