Thomas Shannon, Consejero del Departamento de Estado de EE. UU., manifestó que el Departamento del Tesoro de ese país mantiene bajo reserva toda la información y pruebas sobre la inclusión de Adán Salazar en la lista de narcotraficantes. Si el nuevo gobierno salvadoreño quisiera acceder a ellos, pueden hacerlo, pero no es una documentación que se comparta públicamente por no estar abierto un proceso judicial.
«La relación entre los dos países es excelente y si hubiera interés del nuevo gobierno se manejaría en el transcurso de las pláticas que nosotros normalmente sostenemos sobre todos los temas judiciales. Hay mecanismos y procesos sobre los cuales se pueda solicitar la información, pero no quiere decir que el Tesoro esté obligado a ofrecerla», dijo en conferencia de prensa de la delegación norteamericana previo al traspaso de mando.
Estados Unidos, al ubicar a Adán Salazar (vinculado con el cártel de Texis) en su lista de narcotraficantes, tiene la potestad de «estrangular» cualquier cadena de negocios o transacciones bancarias que este puede tener en aquel país, según señaló su embajadora en El Salvador Mari Carmen Aponte. A su vez, espera la colaboración de la Fiscalía General de la República (FGR) en este caso.
John Feely, Secretario principal adjunto de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, fue enfático al decir que la inclusión de Salazar como narcotraficante no implica que exista un proceso judicial en su contra. «sobre un individuo por la mera apariencia de su nombre en esa lista.
«Esta es una herramienta efectiva que hemos usado en todo el mundo que según nuestras pruebas un individuo está involucrado en asuntos de estafa, fraude o narcotráfico. Pero como no es un caso judicial, si un individuo quisiera aclarar, el Departamento del Tesoro está dispuesto a escuchar. En México, por ejemplo, hay individuos que han aparecido en esa lista y después de aclarar sus actividades, han salido, y otras veces conlleva a ubicar un caso judicial en su contra» explicó.
En el ojo de la justicia estadounidense
El día de ayer Barack Obama envió una carta al Congreso norteamericano donde dio a conocer los nombres de tres extranjeros vinculados al narcotráfico en América Latina. Uno de ellos era Adán Salazar, a quien se le ha relacionado con el cártel de Texis. En una carta enviada por el presidente de la nación norteamericana, Barack Obama, al Congreso estadounidense, informó sobre tres extranjeros relacionados con el tráfico de droga en América Latina.
Además de Salazar, conocido como “Chepe diablo”, se mencionó al colombiano Víctor Ramón Navarro Serrano, y a Francisco de Fátima Federico Barros, de Cabo Verde.
El pasado mes de abril la FGR lo acusó de evadir más de 1 millón de dólares al fisco. Hacienda presentó documentos donde indicaban que ocultó ingresos por $1.4 millones para cancelar menos dinero por concepto de impuesto sobre la renta.
HOTESA S.A. empresa de su propiedad, declaró ingresos gravables por $1.2 millones, pero al revisarse la cuentas bancarias no se reportaron ni respaldaron remesas por $210 mil.
El Salvadoreño de 65 años de edad es propietario de 14 gasolineras y montó, mediante una empresa, cuatro hoteles de ciudad y dos de playa., según una publicación del periódico digital El Faro, es uno de los líderes del grupo delincuencial que opera principalmente en el occidente del país.
Inició joven, y se le conocía como comprador y vendedor de quetzales en la frontera con Guatemala. De ahí estableció una casa de cambio y fue cambista de Pablo Tesak, uno de los dueños de industrias Diana.