José Adán Salazar Umaña, conocido como “Chepe Diablo”, fue designado este viernes como cabecilla del narcotráfico por Estados Unidos.
En una carta enviada por el presidente de la nación norteamericana, Barack Obama, al Congreso estadounidense, informó sobre tres extranjeros relacionados con el tráfico de droga en América Latina.
Además de Adán Salazar, fueron mencionados Francisco de Fatima Frederico Barros, de Cabo Verde, y Victor Ramón Navarro Cerrano, de origen colombiano.
Adán Salazar es un hombre de unos 65 años de edad y es conocido como “Chepe Diablo”. Es señalado como uno de los cabecillas del Cártel de Texis, según una publicación del periódico El Faro. Es dueño de al menos 14 gasolineras y empresario hotelero.
Inició en el mundo de los negocios cuando era joven. Se dedicaba a comprar y vender quetzales en la frontera con Guatemala. Luego estableció una casa de cambio y se dedicó a ser el cambista de Pablo Tesak, uno de los propietarios de industrias Diana.
Tiempo después se dedicó a montar una cadena de hoteles en el país. Esta empresa aglutina cuatro hoteles de ciudad y dos de playa.
Junto a Juan Samayoa (alcalde de Metapán acusado de evasión) montó hace varios años una empresa de granos. Al poco tiempo endosó las acciones a su amigo y se dedicó a otros negocios.
Juan Umaña Samayoa es alcalde de Metapán desde 2006 y, según diferentes investigaciones realizadas por el Estado, también es señalado como uno de los líderes de El Cártel de Texis. En los años que lleva como alcalde le han asesinado a dos de sus síndicos.
El alcalde metapaneco es padre de Wilfredo Guerra Umaña, quien es presidente de Agroindustrias Gumarsal (distribuidor de frijoles y arroz) y de Molinos San Juan (que distribuye harina de trigo). En una entrevista, Guerra dijo que consideraba a Salazar «su segundo padre».
Su paso por el fútbol
Salazar fue presidente de la Primera División del fútbol salvadoreño de 2009 a diciembre de 2011. En la siguiente elección no recibió el apoyo del resto de equipos de la Liga Mayor de Fútbol y fue sustituido por Jorge Cabrera Rajo.
Una de las polémicas en las que se vio envuelto cuando dirigía la Primera División se generó cundo manifestó a la prensa que: «Si uno es de una barra y se quiere matar con el otro, yo no soy policía para evitarlo, que se maten».
Antes de ser presidente de la Primera División, Salazar presidió por muchos años al Isidro Metapán, actual campeón del fútbol salvadoreño. Se sabe que fue el principal financista de ese equipo.
Acusado por evasión
En abril de este año, la Fiscalía General de la República (FGR) también acusó a Salazar por evadir al fisco más de 1 millón de dólares. El Ministerio de Hacienda presentó documentos donde detallaban que el imputado ocultó ingresos por $1.4 millones para pagar menos dinero como impuesto sobre la renta.
En el caso de los hoteles propiedad de HOTESA S.A., sociedad controlada por Adán Salazar, en el 2010 se declararon ingresos gravables por $1.2 millones. Pero cuando revisaron las cuentas bancarias se estableció que no se justificaron remesas por $210 mil.
Dinero de Gumarsal
El ministerio de Hacienda también descubrió que en 2010 Salazar ocultó al fisco $747 mil 164. El dinero lo depositó en cuentas bancarias no registradas contablemente, según la acusación fiscal.
En una de esas cuentas, José Raúl Salazar Landaverde depositó dos cheques que sumaban la cantidad de $50,000. Argumentó que el dinero lo recibió de la de la empresa Gumarsal (sociedad que pertenece a Juan Umaña y Wilfredo Guerra) en concepto de la venta de un inmueble. Luego justificó que lo había depositado en la cuenta bancaria de Adán Salazar porque tenía una deuda con él.
Sin embargo, Salazar Landaverde no aportó ningún documento que comprobara que había recibido un préstamo de Adán Salazar.
El día que la Fiscalía allanó las propiedades de Salzar, el ministro de Seguridad Ricardo Perdomo aseguró que los allanamientos se realizaban en las propiedades de “los máximos dirigentes del Cártel de Texis”.
Actualmente el proceso está en fase de Instrucción, donde la Fiscalía deberá sustentar las pruebas de su acusación.
Vista de la carta enviada por el presidente Barack Obama: