La Unidad Especializada contra el Crimen Organizado de la Fiscalía Genral de la República (FGR) ordenó el allanamiento de 17 inmuebles propiedad de Adán Salazar, Juan Umaña Samayoa y Wilfredo Guerra Umaña, entre los que destacan hoteles, empresas, sociedades y viviendas, vinculados a una investigación por evasión de impuestos, lavado de dinero y activos y otros delitos que susciten de la misma investigación.
Según reportes del Ministerio de Seguridad, se han realizado la revisión de 10 propiedades ubicadas en el departamento de San Salvador, 6 en Santa Ana y una en Usulután.
La FGR informó que investiga el posible delito de evasión de impuestos en el año 2010 y 2011, por un monto estimado de $1 millón, según dijeron
Entre los locales incautados se encuentran cinco hoteles entre los que están el Hotel Capital, hoteles Tolteca y San José; tres despachos contables, la empresa GUMARSAL, gasolinera Bolívar e inmuebles ubicados en residencial Cumbres de Esmeralda y Joya de la Montaña.
El motivo de la diligencia, es porque la Fiscalía General de la República posee los indicios suficientes para proceder a incautar la documentación contable de estas sociedades y empresas, de acuerdo con las evidencias encontradas en el marco de una investigación por Evasión de Impuestos, que se ha convertido en hallazgos de incremento patrimonial no justificados.
«Estamos buscando evidencias del Cartel de Texis en lavado de dinero y narcoactividad, evasión fiscal y agrupaciones ilícitas”, explicó el el ministro de Seguridad, Ricardo Perdomo sobre estas indagaciones.
Agregó que el propósito de los allanamientos era «obtener evidencias contra los tres máximos dirigentes del Cártel de Texis».
La Fiscalía posee los indicios suficientes para proceder a incautar la documentación contable de estas sociedades y empresas, de acuerdo con las evidencias encontradas en el marco de una investigación por Evasión de Impuestos.
José Adán Salazar Umaña, figura como representante legal de HOTESA, Wilfredo Guerra Umaña, representante de GUMARSAL y Juan Umaña Samayoa, alcalde de Metapán y padre de Guerra Umaña, quienes en repetidas ocasiones han sido vinculadas con el Cártel de Texis, que opera en el occidente del país.
¿Quiénes son los señalados?
Los nombres de José Adán Salazar y Juan Umaña Samayoa comenzaron a ser públicos luego que el periódico digital El Faro publicara el 16 de mayo del 2011 una investigación titulada «El Cártel de Texis».
El reportaje detallaba que, según tres informes de inteligencia del Estado, esta organización del occidente del país está vinculada a actividades del narcotráfico y lavado de dinero.
Los periodistas de El Faro relataban que el Cártel de Texis es una estructura de tráfico de cocaína que opera en un territorio que une los puntos ciegos fronterizos con Honduras y Guatemala.
Adán Salazar es un hombre de unos 65 años de edad y es conocido como Chepe Diablo. Es señalado como uno de los cabecillas del Cártel de Texis, es dueño de al menos cinco gasolineras y empresario hotelero.
«(…) según tres distintos informes de inteligencia que sirvieron de base a esta investigación, empiezan los territorios de “Chepe Diablo”, el señor de la droga de occidente, jefe de uno de los cárteles más grandes del país y uno de los más acaudalados de los narcos en el norte del departamento de Santa Ana», relata el reportaje de El Faro.
Juan Umaña Samayoa es alcalde de Metapán desde 2006 y, según diferentes investigaciones realizadas por el Estado, también es señalado como uno de los líderes de El Cártel de Texis. En los años que lleva como alcalde le han asesinado a dos de sus síndicos.
Por ello, el ministro Perdomo aseguró este día que los allanamientos se realizaban en las propiedades de «los máximos dirigentes del Cártel de Texis».
Wilfredo Guerra Umaña es hijo del alcalde pecenista Juan Umaña Samayoa. Además, es el presidente de Agroindustrias Gumarsal (distribuidor de frijoles y arroz) y de Molinos San Juan (que distribuye harina de trigo).
En una entrevista publicada por El Faro el 17 de febrero de este año, el empresario Guerra dijo que considera a José Adán Salazar como su “segundo padre”.