El presidente de Honduras, Porfirio Lobo, ironizó hoy que su homólogo de El Salvador, Mauricio Funes, está comprando aviones para la Fuerza Aérea de su país «más baratos que un carro» y que ya no quiere seguir hablando del islote Conejo en el Pacífico, que ambos países reclaman como suyo.
Lobo reiteró que Funes sigue con el tema del islote Conejo por «un interés político o la compra de aviones», extremos que el gobernante salvadoreño ha rechazado.
El mandatario hondureño retomó la confrontación verbal con Funes, a raíz de que este dijo el domingo que su país estaría comprando una docena de aviones usados a Chile por unos diez millones de dólares, para un mayor equilibrio aéreo en Centroamérica.
«Ya lo vemos, por cierto, a muy buen precio, más barato que un carro. Está bien barato eso (de los aviones), habría que verlo, pero le corresponde a ellos», expresó Lobo a periodistas en Tegucigalpa.
Agregó que no ha sido Honduras quien ha levantado la discusión sobre la pequeña isla de Conejo, en el Golfo de Fonseca, sino que se ha hecho desde El Salvador.
Según Lobo, él ya no debe contestar más sobre el caso, porque es «demasiada insistencia» por «algo que no tiene sentido porque todos sabemos que isla Conejo es de Honduras y no pueden ir a la Corte (Internacional de Justicia) porque ya fueron, apelaron y es caso cerrado».
El islote Conejo nunca estuvo en disputa en el centenario contencioso limítrofe y migratorio que la Corte Internacional de Justicia definió con una sentencia del 11 de septiembre de 1992, aunque la frontera marítima de ambos países no ha sido demarcada.
Lobo dijo además que es «muy peligroso» estar levantando sentimientos del pasado, como el que produjo la Guerra de Cien Horas que los Ejércitos de los dos países libraron en julio de 1969, que dejó un saldo global de unos 5,000 muertos, según apuntes históricos.
Lo que está ocurriendo en El Salvador, según Lobo, es producto de «un afán electorero que no está midiendo lo que es una amenaza, incluso para lo que es el cariño que tiene que haber entre pueblos hermanos».
Funes ha reiterado que él no está en campaña política, ni buscando la reelección en febrero próximo, pero que Honduras está más próxima a sus elecciones generales, el 24 de noviembre próximo, en las que el conservador Partido Nacional, en el poder, buscará un segundo mandato consecutivo.
El tema del islote Conejo ha mantenido a los dos presidentes confrontados verbalmente a través de los medios de comunicación.
Funes también dijo el domingo que él está mejor evaluado por los salvadoreños, que Lobo por los hondureños.
Al respecto, Lobo respondió que respeta «cómo lo pueda ver el presidente Funes», pero que «hay que ver todo el panorama electoral» y que el reclamo de El Salvador obedece más a «un interés político o la compra de los aviones».