El agente Derek Chauvin fue acusado este viernes de asesinato en tercer grado y de homicidio imprudente por la muerte del afroamericano George Floyd el pasado lunes durante su detención en Mineápolis (Minesota, EE.UU.), informó el fiscal del condado de Hennepin, Mike Freeman.
Los cargos fueron revelados poco después del anuncio del arresto de Chauvin, que apareció en un video grabado por viandantes cuando Floyd era detenido el lunes pasado, en el que se le veía con la rodilla presionando el cuello de la víctima, que se quejaba de que no podía respirar.
El fiscal explicó que su oficina no había presentado cargos hasta ahora, porque no disponía de pruebas suficientes para imputar a Chauvin.
«Solo podemos presentar cargos por un caso cuando tenemos suficientes pruebas admisibles para probar un caso más allá de la duda razonable», subrayó Freeman, quien no descartó la imputación de otros agentes que podrían estar involucrados en la muerte de Floyd.
Chauvin es uno de los cuatro agentes que han sido despedidos del cuerpo de policía de Mineápolis por su supuesto papel en la muerte del afroamericano.
Según la legislación del estado de Minesota, el asesinato en tercer grado es aquel que causa la muerte de la persona de manera no intencionada a través de un acto eminentemente peligroso y puede acarrear una pena de cárcel de no más de 25 años.
La muerte de Floyd ha originado una ola de protestas que se han extendido por otras partes del país.
Floyd falleció el lunes por la noche después de ser detenido bajo sospecha de haber intentado usar un billete falso de 20 dólares en un supermercado. En videos que circulan en internet aparece el momento en que el agente Chauvin, ahora arrestado, está con la rodilla sobre su cuello durante minutos.
“Por favor, por favor, por favor, no puedo respirar. Por favor”, se escucha decir a Floyd mientras agoniza.
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El “no puedo respirar” de Floyd se ha convertido, precisamente, en el grito de la protesta que vuelve a poner en evidencia la violencia policial contra los afroamericanos en Estados Unidos.
Protestas violentas
Las protestas contra los abusos policiales se extendieron a Louisville, del estado de Kentucky y se produjeron al calor de la tercera noche de disturbios en Mineápolis y en la vecina Saint Paul (Minesota), donde George Floyd falleció el lunes pasado después de ser sometido violentamente por policías.
En Louisville, al menos siete personas sufrieron heridas de bala en la noche del jueves durante protestas que exigían el enjuiciamiento de los agentes policiales supuestamente involucrados en la muerte de una mujer de raza negra en su apartamento, informaron este viernes medios locales.
Escenas similares a las vividas anoche en Mineápolis y Louisville se reprodujeron en Denver (Colorado), donde manifestantes salieron a la calle para protestar contra la muerte de George Floyd, en una concentración que derivó en disturbios, donde testigos escucharon disparos de bala cerca del Capitolio estatal, sin que se haya informado de víctimas.
Según medios locales, la policía empleó gases lacrimógenos y espray pimienta para dispersar a los manifestantes.