Los programas educativos tienen que apegarse a lo que dicta el Ministerio de Educación (MINED). Así ha sido siempre. Asignaturas, planificaciones, deberes, exámenes es lo que debe cumplirse en los más de 5 mil 168 centros escolares de El Salvador, pero en el municipio de San Francisco Chinameca, departamento de La Paz, el Complejo Educativo Claudia Lars, ubicado en el Barrio El Calvario, comenzó a romper esta regla desde hace cuatro años.
Con un nuevo método de educación, “Metodología por proyectos o de aprendizajes múltiples”, los profesores de este centro educativo pretenden cambiar una educación vertical y apegada a resultados cuantitativos que se ha gestado por años. Este mismo método fue el que puso a El Salvador en el plano internacional al ganar el primer Foro Mundial de Educación 2014, realizado el pasado marzo en Barcelona, España.
El gigante tecnológico Microsoft fue el organizador del foro, donde proyectos acoplados a la tecnología debían mostrar novedosas prácticas de enseñanza. Fueron más de 75 países que participaron, pero El Salvador, de la mano de José Luis Alvarado, profesor de informática, fue el campeón del congreso mundial.
“Todos iban hablando de tecnología por aquí, que tablet por allá, como era una competencia de Microsoft y software, pero nosotros nos enfocamos en metodología y eso es lo que los impactó”, aseguró Alvarado.
– Vos vas a ganar–, me dijo un compañero chileno pero no creí.
Así lo predijo este participante. «Yo, nosotros, el país somos los campeones mundiales», manifestó.
Regido bajo las frase del científico estadounidense Benjamin Franklin «dime y lo olvido, enséñame y recuerdo, involúcrame y lo aprendo», este entusiasta profesor empujó para que el proyecto se estableciera como método permanente de educación en dicho complejo educativo, luego de haber sido compartido por las doctoras españolas Mercedes Blanchard, María Muza y Mónica Jiménez.
Son los alumnos quienes eligen las temáticas a estudiar, no los profesores. «Metodologías por proyectos» permite que entre los estudiantes se discutan preguntas sobre diversos temas ya sean de sociales, lenguaje, matemáticas, o cualquier otra materia. De una amalgama de interrogantes se seleccionará una, esta será el centro de investigación para docentes y alumnos. No importa si se habla de cómo es el ciclo de la lluvia o de biografías de escritores, cada tema tendrá que ser abordado desde todas las asignaturas impartidas.
«Quiérase o no esta metodología integra la tecnología. El punto está en que muchos creemos que la innovación es tener buenas computadoras, tener un software de última generación o tener la mejor tecnología. La innovación no es tener eso sino una forma de enseñar. Eso trasciende», afirmó el docente.
Además, la metodología de aprendizaje múltiple persigue que el estudiante sea el «eje» principal, de acuerdo con Cándida Martínez, maestra de séptimo grado del centro escolar. «No hay pérdida de tiempo con esta metodología porque ayuda a que el alumno tenga mejor desenvolvimiento, se hace más investigativo y creativo, enriquece el vocabulario y aprende a comunicarse con la familia», agregó Martínez.
Los estudiantes también están de acuerdo y complacidos con este reformador y premiado sistema educativo. María de Los Ángeles Martínez y Bryan Cortez, alumnos de tercer ciclo, concuerdan que este aprendizaje múltiple ayuda porque «nos comunicamos más con los compañeros, perdemos el miedo de hablar en público. Uno sabe y aprende mucho más. Es bonito porque ya va evolucionando esto y estamos creando más proyectos», expresó Martínez.
Según Bryan existe más comunicación con los compañeros con esta nueva técnica. «Trabajar en equipo hace que haya más comunicación. Hay ciertas cosas que si trabajamos solos no las podríamos hacer. Además, todo se relaciona, todas las materias se integran en el proyecto», dijo.
Un aula de computación, laptops para cada profesor, retroproyectores para los salones de clases y una pizarra digital son parte del equipo tecnológico que acompaña a esta institución que alberga 875 alumnos. Con este equipo, las clases se vuelven más interactivas y pueden valerse de las TIC para investigar determinados temas que aprenderán durante el año lectivo.
Maestros que son alumnos. El cambio de enseñanza también ha requerido una capacitación específica para los docentes, muchos de ellos no habían tenido ni siquiera un contacto con ordenadores.
Así lo contó Martínez, quien estudió, hizo sus prácticas profesionales y ha sido maestra del complejo durante 33 años y ríe cuando dice que se retirará en dicha institución. «Somos de los maestros veteranos, no usábamos la computadora. Con el apoyo del compañero José Luis teníamos clases dos horas a la semana. También tuve capacitación en Zacatecoluca (La Paz), del programa Geogebra, un software especial de matemáticas».
José Luis Alvarado comentó que le gusta ayudarle a sus compañeros y que debe hacerlo: «tengo que poner a mis compañeros en consonancia con nuevos retos tecnológicos».
La profesora de séptimo grado recalcó que los docentes han aprendido bastante, así como lo han hecho los alumnos. «Yo no había utilizado una computadora, luego con los proyectos uno aprende a hacer las presentaciones, a manejar los programas, cuando no sé le pregunto a él (señala al profesor Alvarado) pero no tengo miedo de trabajar, lo mucho que puede pasar es que el trabajo que he hecho se borre y tengo que volverlo hacer pero ya no tengo miedo de tocar algo pensando que puedo arruinarlo», añadió.
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Aunque reconoce que el MINED ha dado algunos recursos materiales al centro escolar, como computadoras portátiles para el personal docente, Alvarado señaló que aún espera un pronunciamiento de la cartera de estado ante el gane. «Estamos esperando a saber cuál es su postura ante este gane, porque ir a ese mundial no fue cosa fácil».
Cándida Martínez reaccionó ante ello y declaró que Alvarado contó que «el ministerio de educación o los presidentes de los países participantes estaban pendientes de lo que estaba pasando en ese momento (foro). Él estaba esperando que alguien le llamara y nadie lo hizo».
«Yo fui a representar a mis compañeros, a los alumnos de esta escuela, al departamento y al país. Fuimos a levantarle la cara al país entre 75 países», añadió este informático que ha revolucionado el aprendizaje en San Francisco Chinameca.
Continuarán fuerte con el proyecto, según el educador porque este sistema no «excluye» estudiantes que generalmente son evaluados o «etiquetados» con una nota, así también porque con el esfuerzo y tiempo de los educadores debe ser mayor. «Debemos romper el paradigma que se tienen que cumplir con las normas o programas de estudio, que los profesores lo saben todo. Este programa es flexible e integrador de la comunidad», agregó.